La diversión es una medicina y toda medicina debe ser bien dosificada y a tiempo.

Fray Francisco Alvarado (Dominico sevillano conocido como el «Filósofo Rancio», 1756-1814)


Francisco Alvarado, comúnmente conocido como «el Filósofo Rancio» (Marchena, 25 de abril de 1756-31 de agosto de 1814), fue un religioso dominico y libelista reaccionario español. Las Cartas aristotélicas, escritas entre mayo de 1786 y noviembre de 1787, pero impresas en 1825, combaten los sistemas opuestos al escolasticismo, en especial el eclecticismo, revitalizado en el siglo XVIII por obra del médico y lógico valenciano Andrés Piquer. Alvarado defendió la Inquisición, de la que fue nombrado consejero por Fernando VII poco antes de fallecer. También escribió Carta de un tomista de Sevilla. En estas obras Alvarado se erigió como acérrimo adversario de toda innovación filosófica o política ilustrada, liberal, afrancesada, jansenista, masónica o librepensadora.